Ahh, el amor. La madre de todas las fuerzas de la naturaleza. La fuerza más poderosa e influyente, no sólo en los seres humanos, si no en todo ser vivo.
¿Cuántos de nosotros no hemos experimentado este amor irracional? Ese amor loco, que no conoce sentido ni lógica. Que te inspira a hacer cosas estúpidas o ridículas con tal de agradar a la persona amada. “Él, o ella, te han hecho perder la cabeza” ¿Cómo explicar estos extraños efectos del amor? Te hace sentir en las nubes, te atornilla el pensamiento sólo con su imagen ¿Cómo no volverse loco? Siempre me han vendido la idea de que un amor irracional, es un amor improductivo. Que incluso es como una enfermedad que te paraliza y no te deja actuar de forma congruente: Sin ti, no puedo comer, no puedo concentrarme en el trabajo… pienso en ti, día y noche…
Y luego hay estas otras teorías de los amores racionales. Esos “buenos amores” que te llevan por el buen camino porque concuerdan con la razón, porque son mas balanceados, más saludables, y traen estabilidad a tu vida. Ese buen amor, tu mejor amigo, tu confidente. El trabajo estable.Todo es fácil a su lado.
Qué confusión. Resulta que cada que siento amor por algo o alguien, lo tengo que categorizar: Si me hace perder la cabeza, es amor malo o irracional. Si me mantiene en control, es amor bueno, amor racional….
Yo no estoy de acuerdo con categorizar al amor. Creo que sólo existe AMOR. Puro y esencial. Los demás sentimientos o emociones que se transmutan de él son derivados de los efectos del amor. La pasión , el romanticismo y el sexo, por ejemplo, son emociones fácilmente confundibles con el amor. Mientras que la pasión y el sexo son manifestaciones físicas y biológicas, el amor es espiritual y va más allá del plano físico y material.
Incluso, varios estudios científicos y filosóficos han concordado, que el amor, es la fuerza invisible que sustenta a toda la creación y a todas las leyes físicas y meta-físicas del universo.
“Hay una fuerza extremadamente poderosa para la que hasta ahora la ciencia no ha encontrado una explicación formal. Es una fuerza que incluye y gobierna a todas las otras, y que incluso está detrás de cualquier fenómeno que opera en el universo y aún no haya sido identificado por nosotros. Esta fuerza universal es el amor”– Albert Einstein
Siendo el amor la fuerza que sustenta todo, no es de locos pensar que también es la fuerza creativa, pura e innata, que te mantiene en conexión con la consciencia universal, y por lo tanto, que el sentir locura, pasión e irracionalidad de forma positiva es simplemente una expresión pura del ser creativo. Si el amor, te conecta con la parte más creativa de tu ser, entonces no puede ser improductiva. Al contrario, te lleva a lugares de inspiración que jamás pensarías alcanzar usando tu mente racional. El amor expresado en el trato a las personas y en las acciones, multiplica el sentimiento y estado de bienestar colectivamente y nos hace avanzar como sociedad.
El amor no tiene connotaciones negativas ni destructivas. Las acciones basadas en celos, egoísmo, miedo e inseguridad, vienen del EGO, no del AMOR. Si sientes que amas a alguien pero los celos te consumen. Si crees que amas demasiado y por eso tienes miedo de perder a alguien y te la pasas controlando a la persona, no estás realmente amando. Es la manifestación del EGO tratando de defenderse con su máscara individualista.
El amor y la productividad van de la mano. El amor por uno mismo, por la pareja, la familia y el amor por los demás, es la fuerza inspiradora con la que es posible desarrollar potencial creativo y expresarlo de forma única con nuestras acciones y pensamientos.
Enamórate de ti, ese amor se expresará hacia los demás, hacia todo lo que haces y piensas… y ese amor te será correspondido con más amor, éxito y prosperidad!
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